Esta imagen revela a niños calcinados, los cuales están posando ante el "médico" luego de haber realizado un experimento sobre la resistencia humana a los cambios de temperatura. Algunos niños sufrían amputaciones, deformaciones de columna y hasta padecían operaciones quirúrgicas, vivos, en nombre de la ciencia alemana.La mayoría de los profesionales que trabajaron en esta clase de experimentos quedaron impunes tras la guerra y muchos incluso siguieron ejerciendo su actividad sin interferencias ni sanciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario